El pasado sábado 9 de septiembre, vivimos la 5º edición de nuestro Taller Abierto en Nube Lab. Aunque el día estuvo nublado, no impidió que nuestro taller, ubicado en el Parque Padre Hurtado, se llenará de asistentes que tuvieron la oportunidad de acercarse al arte a través del juego y la creatividad.
En este día, una de nuestras salas se transformó en un lienzo abierto donde personas de todas las edades, incluyendo niñas y niños, tuvieron la libertad de rayar, dibujar y taggear paredes y suelos con plumones que ellos mismos construyeron a partir de materiales reciclados. Fue emocionante ver cómo cada participante dejaba su marca en este espacio. En otra de nuestras salas se crearon máscaras utilizando cajas de cartón. Cada máscara se convirtió en una expresión individual, reflejando la personalidad y estilo de su creador. Esta actividad requirió tiempo y mucha imaginación, y los resultados fueron sorprendentes. En nuestro Café Solidario, disfrutamos de deliciosos productos basándonos en el intercambio, fomentando la reutilización de materiales como tapitas de botellas, cajas de cartón y envases de chamytos. También fue el escenario del primer Torneo de Bachillerato Nube, que desafió a los participantes con categorías difíciles, pero no hubo obstáculo que detuviera su habilidad y rapidez con las palabras. Por si fuera poco, inauguramos una nueva sección llamada “Mini Museo” donde Constanza Von Dessauer nos presentó su obra que combina arte y tecnología, y que nos ofreció una experiencia inmersiva y sensorial. Además, a nuestras ya conocidas secciones de juegos La Tercera y Kiosco Nube, se sumó la nueva sección EscuelaNube.org que debutó con un sorteo.
Queremos expresar nuestro agradecimiento a nuestros artistas invitados, José Cori, David Atencio y Constanza Von Dessauer, quienes contribuyeron a animar y estimular la creatividad de nuestros participantes. También agradecer a Claudio Engel y la cocina de Angela, Ele y Clara, por su compromiso y colaboración en nuestro Café Solidario. Al Parque Padre Hurtado, a la Ley de Donaciones Culturales y a la Fundación Olivo por su apoyo continuo, que nos permite llevar a cabo esta actividad. ¡Y a todas y todos quienes fueron, jugaron y se divirtieron con nosotros!
